Los rellenos dérmicos son sustancias que se inyectan en la dermis o hipodermis para aportar volumen en depresiones cutáneas, arrugas, surcos, cicatrices o atrofias de tejido, lipodistrofia por HIV o por otras patologías. También permiten el aumento o la remodelación de ciertas zonas faciales como pómulos, mejillas, mentón, labios, nariz.

La edad, las hormonas, la exposición solar y las pérdidas bruscas de peso, son factores que provocan la aparición de arrugas y flacidez cutánea. La piel se vuelve más frágil y menos elástica; disminuye el contenido en ácido hialurónico, tan importante para la formación de colágeno y para la hidratación celular.

Existen diferentes tipos de rellenos, y escogeremos el más adecuado según las necesidades y peculiaridades del paciente. En todos los casos, los materiales utilizados cuentan con la autorización sanitaria del Ministerio de Sanidad y Consumo.

Se inyecta suavemente previa anestesia tópica (crema) el producto de relleno bajo la dermis del paciente, lo que restaura instantáneamente el volumen de la piel de manera natural.

En función del material de relleno elegido y la cantidad implantada pueden ser necesarias una o varias sesiones, más o menos espaciadas en el tiempo, para completar el resultado y conseguir que la piel recobre la flexibilidad y elasticidad de forma natural.

Aunque tras la implantación de rellenos pueden aparecer rojeces o hematomas, éstos desaparecen espontáneamente y, mientras tanto, es posible ocultarlos con maquillaje. También puede aparecer una cierta inflamación local durante unos días. Siendo los materiales utilizados reabsorbibles, existe la necesidad de repetir periódicamente los implantes para mantener los resultados conseguidos como parte del protocolo terapéutico.

La utilización de rellenos nace de la necesidad de remodelar la cara en su conjunto, tanto en reposo como en movimiento. El conocimiento de los cánones de belleza, un estudio anatómico detallado del paciente y la combinación de los distintos materiales de relleno en las diferentes capas cutáneas consiguen en pocos pasos, una armonía en el rostro, simetría y un aspecto juvenil y atractivo.

Los precios varían en función de la técnica y el producto utilizado en cada paciente. Siempre se realiza presupuesto gratuito previo al tratamiento.